Cuesta pensar en un tiempo en el que quienes ejercían la odontología lo hacían sin requerir ningún tipo de titulación. Algunas de esas personas no lo hacían porque no quisieran formarse, sino porque no podían. Es el caso de Lucy Beaman Hobbs, la primera mujer titulada en odontología la historia, y quien tuvo que remover cielo y tierra para conseguir su merecido título.

Lucy Beaman Hobbs: de ejercer como maestra a interesarse por la medicina

Hobbs nació en Ellenburg Town, Nueva York, en 1833, en el seno de una humilde familia numerosa.

A pesar de que su infancia estuvo marcada por la tragedia (su madre murió cuando ella solo tenía 10 años, y dos años después, falleció su madrastra), Lucy ya mostraba una clara resiliencia entonces. En 1849, con 16 años, se graduó como maestra junto con uno de sus hermanos.

Para ejercer esta profesión, se desplazó hasta Brooklyn (Michigan), donde se alojó, durante 10 años, en casa de un matrimonio de médicos. Ellos fueron los responsables de, entre libros y charlas, despertar su interés por la medicina.

Así pues, y como resultado de un interés que no dejaba de crecer, Lucy se muda a Ohio con 26 años para intentar ser admitida en el Eclectic Medical College de Cincinnati y empezar cuanto antes sus estudios. Lo que no esperaba era que su acceso fuese denegado por, sencillamente, ser mujer.

Fue el decano de esta institución quien, al ser testigo de su pasión por la medicina, le concedió una tutoría, durante la que le aconsejó formarse en el campo de la odontología. Pero había un problema: en aquel momento, antes de entrar en cualquier escuela, era necesario buscarse un maestro que los aceptase como ayudantes.

Una vez más, y como consecuencia de su condición de mujer, ningún odontólogo quiso ayudarla a iniciarse en este campo, por lo que Lucy intentó, una vez más, acceder a la enseñanza, esta vez, en el Ohio College of Dental Surgery.

La tenacidad de Hobbs empieza a dar resultados

También en el Ohio College of Dental Surgery fue rechazada, pero como ya le sucedió en el Eclectic Medical College de Cincinnati, llamó la atención del decano, el Dr. Jonathan Taft, quien se ofreció a ser su tutor hasta que otro miembro de la facultad accediese a enseñarle, algo que no sucedió durante meses.

Finalmente, fue el Dr. Samuel Wardle, recién graduado, quien accedió a iniciarla en la odontología.

Gracias a los nuevos conocimientos adquiridos con Wardle, Hobbs se animó a abrir su propio consultorio. Era 1861 y ella tenía 28 años.

Cuando Hobbs abrió su primer consultorio, no tenía titulación. Este no era un caso aislado: en ese momento, prácticamente todos los dentistas abrían sus consultorios sin tener un título que acreditase sus conocimientos.

La guerra civil estadounidense la obligó a cerrar, pero no tardó en abrir su segunda clínica, esta vez en Iowa, con la que se granjeó una gran reputación.

La titulación, cada vez más cerca

Su clínica de Iowa le dio el empujón definitivo.

En 1865, Hobbs recibió una invitación para asistir como invitada al 4th Annual Meeting of Iowa State Dental Society en Dubuque, sociedad que no tardó en modificar sus estatutos para poder admitir mujeres, convirtiendo a Hobbs en miembro por unanimidad.

No obstante, el reconocimiento de las buenas prácticas de Lucy no acabó ahí: la American Dental Association la reclamó como delegada en su reunión anual, donde varios doctores solicitaron a los rectores de los colegios y administrativos de facultades la admisión de Lucy so pena de retirar su apoyo a la asociación si no cedían.

Las respuestas no se hicieron esperar: ese mismo año, la Facultad de Odontología de Ohio renunció al veto que prohibía admitir mujeres en la institución, y el Dr. Taft terminó de mover los hilos para que Lucy fuera admitida como alumna de último curso, donde destacó en cada una de las disciplinas que cursó.

Lucy Beaman Hobbs se convierte en la primera mujer titulada en odontología de la historia

Un año después, el 21 de febrero de 1866, Lucy Beaman Hobbs consiguió su merecido título de Doctora en Cirugía Dental, convirtiéndose en la primera mujer odontóloga titulada de la historia.

La facultad de Odontología de Ohio reconoció a Hobbs como una «estudiante superior y una gran garantía para la profesión elegida».

Ya como Cirujana Dentista, Hobbs expuso un trabajo ante la Iowa State Dental Society, lo que la señala como, una vez más, la primera mujer en la historia de los EE. UU. En presentar un artículo científico ante una sociedad dental.

Su legado

En 1900, casi mil mujeres habían seguido los pasos de Lucy para convertirse en odontólogas tituladas, y desde 1983, la American Association of Women Dentistry concede, anualmente, el premio Lucy Hobbs Taylor Award en reconocimiento de la excelencia profesional y el papel de la mujer en la odontología.

También te puede interesar

¿Conoces los tatuajes dentales?
El primer odontólogo de la historia